Problemas de seguridad en los aparcamientos del Hospital de Valme
El sindicato CSIF pide a la dirección del centro que garantice la seguridad de profesionales y usuarios tras una nueva agresión a un vigilante en un recinto sin vallado donde son habituales los episodios de extorsión y comportamientos cada vez más agresivos
La Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF), a través de su área de Seguridad Privada, ha exigido a la Gerencia del Hospital de Valme medidas para garantizar la seguridad de profesionales y usuarios tras una nueva agresión a un vigilante, ocurrida en esta ocasión en el aparcamiento público gratuito del centro sanitario. Un parking de 1.500 plazas que «no cuenta con vallado ni control de acceso alguno y en él son cada vez más habituales diferentes episodios de extorsión por parte de agresores habituales”, explica el delegado de CSIF Seguridad Privada Francisco López Jurado.
“Sólo dos vigilantes patrullan el recinto y su presencia no es permanente; se les obliga a que lo hagan por separado, pero desde lo acontecido, se ha ordenado que lo hagan juntos”. Estos profesionales acuden al interior del hospital para intervenciones, una circunstancia aprovechada por agresores habituales para campar a sus anchas. Solicitan dinero por estacionar, circunstancia por la que a diario se da aviso a Seguridad de su presencia. “Desde hace meses, su comportamiento es cada vez más agresivo hacia los vigilantes de seguridad, con amenazas, insultos, tirándoles piedras e incluso ejerciendo funciones de observación para detectar su presencia; se esconden entre los coches cuando detectan al vigilante y así continúan extorsionando a usuarios y profesionales”.
La última agresión aconteció hace pocas fechas cuando uno de los vigilantes, perteneciente a la empresa Ilunion Seguridad, fue agredido de manera brutal sobre las 7 de la tarde. El suceso tuvo lugar cuando el guarda observó un vehículo con los cristales bajados y una persona que pedía dinero a quienes estacionaban, alguien ya conocido por el equipo de seguridad. Ante la escena, el vigilante le invitó a marcharse del recinto y éste, de manera sorpresiva, se abalanzó sobre él empujándolo y logrando desequilibrarle hasta caer al suelo golpeándose la cabeza y quedando aturdido. Una circunstancia que el agresor aprovechó para no dejar de golpearlo en la cabeza a pesar de la situación de indefensión del vigilante, según narración del responsable sindical de CSIF. De tal modo que el profesional tuvo que ser atendido de golpes y contusiones, necesitó sutura en la cabeza, encontrándose actualmente de baja laboral y convaleciente.
El sindicato aclara que en 2020 el Hospital de Valme inauguró un parking para los empleados con 753 plazas, perimetrado y con un control de acceso y vigilancia, que no sufre el azote de estas personas, y que sirve de paso habitual de público y motocicletas hacia lugares ajenos al hospital como el Cortijo de Cuarto, complejo Blanco White, o Fuente del Rey. Por ello, el área de Seguridad Privada de CSIF Sevilla advierte de que el aparcamiento público gratuito del Hospital de Valme también se usa como punto de encuentros de estas personas, habiendo sido recientemente espacio de abandono de un cadáver, grave hecho que pudo presenciar el vigilante de seguridad que patrullaba en aquel momento.