Cinco agentes de la Policía Nacional de Alcalá de Guadaíra detenidos en una operación antidroga
Estas detenciones se enmarcan dentro del total de las 35 llevadas a cabo en una operación protagonizada por un equipo de Asuntos Internos
Gran conmoción se ha producido en Alcalá de Guadaíra y entre la opinión pública provincial en general tras la operación policial llevada a cabo durante la madrugada de ayer miércoles, que se saldó con 35 detenciones, entre las que se incluían cinco agentes del propio grupo de estupefacientes, acusados de los mismos delitos que combatían. Todo ello en el seno de la operación llevada a cabo por la unidad de Asuntos Internos con el apoyo de un equipo especializado de Madrid, y que ha conducido a una supuesta trama de corrupción policial.
Escuchas telefónicas, seguimientos y vigilancia expresa han sido las herramientas de las que se ha valido la unidad investigadora hasta llegar a conseguir firmes pruebas contra los agentes implicados. Todo ello valiéndose de una estrategia de sigilo para evitar alertar a los investigados, lo que ha propiciado la operación relámpago final que ha sorprendido a todo el mundo. Para la misma se han requerido tres meses de tiempo y un equipo de agentes encubiertos, que finalmente han logrado descubrir los entresijos de la presunta red criminal que operaba desde dentro del cuerpo, e incluso de la misma comisaría.
La comisaría de Policía Nacional de Alcalá de Guadaíra está ubicada en el barrio de Rabesa, que cuenta con gran historial en tráfico de drogas y otras actividades delictivas, y en su mayor parte los detenidos proceden de él, lo que de acuerdo con las primeras informaciones conocidas, indica la posible vinculación fluida entre los agentes corruptos y los narcotraficantes de la zona.
No obstante, las investigaciones y registros aparejados a la operación se han extendido también a localidades próximas como Mairena del Alcor y Utrera, habiendo extraído de las mismas los agentes encargados de la operación pruebas útiles en materia probatorio. Entre ellas, armas y herramientas propias del cultivo de marihuana, estupefacientes, y una importante cantidad de dinero en metálico. Siendo a través de ellas de donde el equipo investigador ha inferido que puede tratarse de una organización criminal a gran escala. Operación sobre la que se ha decretado secreto sumario, lo que impide entre otras cosas, conocer las identidades de los detenidos y puestos a disposición judicial. Sin embargo, esta tarde se ha conocido que los cinco policías detenidos han pasado a prisión, comunicados y sin fianza, tras haber respondido sólo a las preguntas de sus abogados defensores.
Ante la situación, el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Francisco Toscano, ha apelado a la prudencia y ha mostrado su agradecimiento a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por su incansable lucha contra el narcotráfico. Además, el subdelegado ha indicado que es necesario esperar a tener todos los datos para poder emitir un juicio definitivo.
