Los Andalucistas elevan a pleno una moción en defensa de Abengoa

Los Andalucistas de Mairena del Alcor han elevado a pleno una moción en defensa de la empresa multinacional andaluza y española Abengoa, cuyo futuro se ve amenazado estos abengoadías al encontrarse en fase pre-concursal. La moción se debatirá mañana a partir de las 8 de la tarde entre los puntos del día del plenario municipal. Solicitándose con ella a las autoridades andaluza, española y europea un esfuerzo de presión sobre las partes, en particular los sectores empresarial y financiero, para que las necesidades de inyección de capital a Abengoa consigan ser satisfechas. Todo ello en el contexto de un plan de viabilidad que no son pocas las voces que consideran posible, aunque para los Andalucistas las ayudas no pueden ser un cheque en blanco, sino estar condicionadas a un plan de viabilidad con un seguimiento periódico de su evolución, y una serie de cambios estructurales en la compañía.

 

Los Andalucistas maireneros trasladan también con la moción su apoyo y solidaridad a los trabajadores de Abengoa, con sede en Palmas Altas (junto al puerto hispalense), donde entre su plantilla no faltan empleados procedentes de nuestra localidad, de ahí que llaman a unirse a la moción al resto de formaciones, en la creencia de que se está hablando poco y movilizando poco a la sociedad andaluza, ante lo que consideran un episodio alarmante más de la poca implicación social existente ante la desindustrialización de Andalucía y Sevilla, a la vez que factor determinante en su déficit industrial en comparación con el resto de España. Una crítica que hacen sin negar que se está trabajando con discreción por las administraciones para dar solución al asunto, pero que es una línea de acción que se completaría con la implicación social masiva, casi inexistente al margen de la prensa que informa puntualmente del serio asunto.

Entienden los Andalucistas que este silencio o falta de apoyos expresos a Abengoa, resultaría impensable en otra comunidad autónoma, dadas las circunstancias. De igual modo que estiman que salvar a la empresa debe ser objetivo prioritario a pesar de las dificultadas, por el drama que supondría su fracaso, y porque posee proyección mundial, tecnología puntera en los sectores de energía renovables y convencionales, o desalación de aguas, entre otras, que la hacen viable. Cabe recordar que Abengoa emplea a 4.000 personas de la capital y provincia, 7.000 en toda España, y en torno a 27.000 en el resto del mundo. Todo ello sin entrar en el arraigo que posee en nuestra tierra, donde opera desde los años 40 del siglo pasado. Atravesando ahora un apalancamiento por su necesidad de capitalización para afrontar sus compromisos de pago o nóminas, motivada por sus fuertes inversiones, la caída de los precios del gas y el petróleo, o la ralentización de inversiones en muchos países a causa de la crisis económica.

Dado lo cual, queda claro que en la deriva de la empresa existe una componente fuerte de responsabilidad de sus gestores, aspecto en el que desde luego hay que incidir asimismo. Aunque para los Andalucistas esa petición de responsabilidades, si las hubiere, debe llegar como paso posterior al más urgente y prioritario de reflotar la empresa y garantizar su futuro, con una realista reformulación de sus objetivos, estrategias y estructura, sorteado el escollo del espaciamiento de su deuda y recapitalización.

Como es conocido por la sociedad, tras la retirada de Gestamp del proceso de recapitalización de Abengoa, tasado en unos 6.300 millones, la empresa requiere de entrada de capital bancario o accionarial para amarrar su futuro, sobre el cual los Andalucistas insisten en mostrar su optimismo.

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