La Consejería de Salud de la Junta rechaza el crematorio por sus posibles efectos nocivos
La Junta confirma de ese modo la información adelantada por el alcalde Juanma López el pasado día 26, la jornada previa a la concentración contra la instalación, que tuvo lugar en la plaza Antonio Mairena
La Consejería de Salud ha declarado “no viable” el proyecto de crematorio del polígono industrial de Gandul en Mairena del Alcor (Sevilla), que la empresa Gesit, S.L. proyecta aparejado al tanatorio en actual fase de conclusión. Se confirma así la noticia avanzada por el alcalde Juanma López el día anterior a la concentración contra la instalación, que se celebró el pasado 27 de enero en la plaza de Antonio Mairena. La medida adoptada por el departamento de la Junta de Andalucía se fundamenta en la insuficiente información aportada por el empresa promotora, lo cual «no permite descartar efectos negativos para la salud de la población residente”, en línea con lo que vienen señalando los colectivos sociales que se oponen desde el principio al horno crematorio, cuyos pasos iniciales se dieron en el año 2021.
De este modo, y salvo sorpresa en contra, se resuelve la calificación ambiental solicitada por la empresa Gesit, S.L., promotora del centro fúnebre. No obstante, la decisión sólo afecta al horno crematorio, entendiéndose así que la sala de duelos y resto de servicios aparejados a la instalación prosiguen su curso, tras verse satisfecha la demanda ciudadana en contra del crematorio, que recibió la adhesión de casi 2.000 firmas oponiéndose al mismo.
La resolución emitida por la Consejería de Salud es de carácter vinculante, por lo que la licencia para el crematorio no le podrá ser concedida desde el Ayuntamiento de Mairena del Alcor, atendiéndose con esta decisión los argumentos esgrimidos en contra del mismo en lo tocante a su impacto en la calidad del aire para la población debido a la cremación de cadáveres, con las consiguientes partículas emitidas, en algunos casos de efectos carcinogénicos o dioxinas cargadas con azufre o dióxido de nitrógeno, entre otras sustancias.
Por otro lado, el informe de la Consejería cuestiona la documentación presentada por la empresa al no aclarar que en el entorno próximo a la instalación se hallan a una distancia inferior a un kilómetro centros escolares y una parte importante del núcleo urbano de la localidad, dado lo cual algo más de 4.000 habitantes podrían recibir humos procedentes del centro de calcinación de manera más o menos directa.