Bonsor de camping en Matalascañas en 1920
Jorge Bonsor no dio una vuelta por las playas de Doñana en el verano de 1920 precisamente buscando el fresco. Intentaba localizar el emplazamiento de la escurridiza ciudad de Tartessos.
Durante su paseo exploratorio descubrió, no sin asombro, el campamento veraniego de Mata de las Cañas, o como ya era denominado entonces, Matalascañas.