Vecinos y comerciantes del centro plantean sus dudas sobre el nuevo plan

Una cosa sí está clara: es necesario revitalizar el moribundo centro. La cuestión es cómo. El nuevo Plan Centro, la medida que pretende poner en marcha el Ayuntamiento en los próximos días, genera suspicacias entre vecinos y comerciantes de la zona desde que se hiciera público la semana pasada. Este martes han tenido ocasión de preguntar a Ricardo Sánchez, el alcalde, J. Carlos Copete, delegado de Urbanismo o Rubén Mellado, técnico de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU). Componían la mesa de «resolución de dudas» y les acompañaban otros delegados del gobierno.

El centro será semipeatonal con el objetivo de generar «tráfico finalista», es decir, que los vehículos que accedan lo hagan para algo concreto y no solo para cortar camino. Se hará «blindando» la Plaza de las Flores, con cortes de tráfico temporales (fines de semana y festivos, como Semana Santa) en los cruces de Ancha con Juan María Coca, San Fernando con San José y Benardo y la parte final de Jorge Bonsor, entre el Café Plaza y la Caja Rural (que ahora aparecen en azul). Aún en sus inicios, el gobierno estudia habilitar en tales cruces pantallas LED que indiquen la posibilidad de acceso, que sería total en días laborables, según lo explicado.

Se une la disposición de un nuevo aparcamiento en el solar disponible entre Ancha, Juan María Coca y Cantarito, frente a Tomás de Paz, dotado con un sistema antipolvo que evite molestias, como ha sucedido en otras ocasiones. Las plazas disponibles en la plaza Antonio Mairena, frente al Ayuntamiento y en lado opuesto, serían rotatorias, es decir, se podría aparcar durante media hora («para que dé tiempo de hacer los mandados», decía Copete). Una especie de zona azul sin multas, sí con alguien vigilando.

plancentrodudasSe une el cambio de sentido de algunas calles: Real-Daoiz y Trianilla en su último tramo (en principio) que, junto con los cierres temporales en los cruces comentados, cumplirían el objetivo de disuadir al conductor de cruzar por el centro, es decir, que le suponga un coste tal que prefiere hacerlo por alrededor.

Para ilustrar las explicaciones, los «ponentes» dieron un repaso a mapas y planos. Copete incluso mostró un Plan de Peatonalización del Centro de 2010, demostrando que viene de largo. Un plan, dijo, mucho más «radical» en la forma. De aquel año se guardan incluso encuestas, aunque a los presentes (al menos los que tomaron la palabra), el rediseño les cogía por sorpresa. A algunos ni siquiera les constaba una antigua petición de los vecinos de Arrabal que, decían desde la mesa presidencial, hacía tiempo que estaba sobre la mesa.

En el turno de preguntas y comentarios, quien así lo quiso tomó la palabra. Entre las críticas, las de los vecinos y comerciantes del tramo final de Trianilla, el más estrecho, que ven contraproducente el cambio de sentido. De hecho, los escasos metros de calzada pueden generar peligro. Muchos comerciantes se declararon en contra de la medida (uno incluso preguntó si se podían recoger firmas) y algunos sugirieron la posibilidad de estudiar primero lo de la falta de aparcamiento y ver cómo evoluciona la medida, para luego pensar en semipeatonalizaciones y cambios de sentido. ¿Qué pasa con el aparcamiento subterráneo de la Villa del Conocimiento y las Artes?, se preguntaba uno. Claro que eso, explicó Rubén Mellado, seguiría sin poner fin al otro problema: el de la velocidad de los vehículos que solo cruzan (que, a juzgar por lo comentado por un vecino de San José, es palpable en algunos tramos).

Otros vecinos y comerciantes aprovecharon para pedir al gobierno más actuaciones concretas en el centro, como fomento de alquiler de locales y viviendas (hay muchas vacías) o programación cultural, como mercadillos en determinadas fechas, que los delegados estimaron poder llevar a cabo de implantarse la medida. Otro vecino preguntó sobre el uso de veladores no solo en el centro.

Por otra parte, los delegados y el alcalde adelantaron más obras y reordenación del tráfico para más adelante, por ejemplo, con una rotonda en el cruce hacia Brenes, persiguiendo la reducción de velocidad, entre otras cuestiones. También se retirarían los adoquines de San José y se estudia cómo restringir el tráfico en Tomás de Paz.

Al terminar la sesión, hubo quien se marchó decepcionado y quien anunció un voto de confianza. En todo caso, el gobierno aseguró que se trata de pruebas que hay que realizar para ver los efectos, que su implantación no genera costes y que siempre se podría dar marcha atrás.

Un comentario sobre “Vecinos y comerciantes del centro plantean sus dudas sobre el nuevo plan

  • Si lo que se busca es dar vida al centro la peatonalización sería su condena…hoy en dia la gente vamos a donde es facil y rapido acceder y aparcar.
    Si lo que se busca es limitar la velocidad está facil: vadenes y radares que multen.
    Pero lo que no se puede hacer de ninguna forma es que los vecinos de Mairena tengan que hacer el triple de km cada vez que se monten en su coche para ir de un sitio a otro.
    Vamos a dejarnos de medidas absurdas que estamos en Mairena no en la Gran Via (donde por cierto si se puede circular)

    Respuesta

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *