La Guardia Civil precinta una nave industrial en Mairena por fraude en el envasado de aceites de oliva
Se trata de una empresa vinculada a una red que envasaba y comercializaba aceites que no eran de oliva como si lo fueran recurriendo a varias marcas que la Junta recomienda no consumir y devolver
La Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía ha puesto en marcha un dispositivo de actuación tras conocer un fraude en la comercialización de aceites comestibles, consistente en la identificación como «Aceite de Oliva Virgen Extra» o «Aceite de Oliva Suave», en distintas marcas cuyo contenido en realidad no era tal, sino mezclas de otros aceites de semilla y de aceites lampantes. Las actuaciones han sido implementadas desde la Junta tras los informes emitidos por la Benemérita, vinculados éstos a actuaciones de control realizadas los pasados días 4 y 5 de diciembre, jornadas en las que desde el SEPRONA se inspeccionó una nave de un polígono industrial de Mairena del Alcor, donde se envasaban aceites comestibles «sin contar con registro sanitario ni condiciones higiénicas», según reflejaron los agentes encargados de la misión tras la inspección realizada.
En dicha intervención se localizaron productos y documentos en los que se referenciaban empresas de las localidades malagueñas de Campillos y Almargen, cordobesas de Baena y Lucena, sevillana de Los Rosales-Tocina, o la granadina de Deifontes, y de Murcia. En total, fueron once las referencias localizadas, y tras la intervención tanto los productos como las etiquetas y los documentos quedaron incautados; y la nave precintada.
Posteriormente, desde la Consejería de Salud y Consumo de la Junta han pedido a los consumidores que se abstengan de consumir las marcas en cuestión, que son Valle de Arbosana, Tierra de Arbequino, Tesoro de Oliva, Scudo, Oliv, Oleo L.U.X.E., La Rama, Agricultor del Valle, Aciencia, Essential, Carro y Carrero. No obstante, llaman a la calma en el sentido de que no poseen constancia de ningún peligro concreto.
En todo caso, sí sostienen tener indicios de que se trata de una posible actividad fraudulenta, ya que se constató ausencia de acreditación del origen de la materias primas, al margen de tratarse de una actividad alimentaria clandestina, por lo que por precaución «se recomienda a las personas que no adquieran aceites con esas etiquetas y, en el caso de tenerlos su poder, se abstengan de consumirlos y los devuelvan al punto de compra», para que se pueda realizar su gestión por parte de un gestor autorizado evitando que puedan reintroducirse en la cadena alimentaria.
Por otra parte, y dadas las ramificaciones de la operación, las autoridades sanitarias andaluzas han alertado sobre todas las ubicaciones identificadas como destinatarias de estos aceites, en concreto a sus homólogas de la Región de Murcia; y dentro de Andalucía también a las autoridades encargadas del control de fraudes y calidad agroalimentaria al objeto de que establezcan las medidas que correspondan, ya que la Guardia Civil ha constatado la comercialización de las mencionadas marcas en otros puntos como Los Rosales, Tocina, Sevilla capital, así como en Huelva.
